Cada vez son más las pyme y los autónomos que recurren a alternativas como el renting frente a la compra tradicional de vehículos. En esta modalidad en auge encuentran grandes ventajas, pero hay que saber que el renting puede tener varias versiones y cada una se orienta a un perfil de cliente distinto. Dependiendo a qué te dedicas: pyme o autónomo, te diremos qué renting necesitas.
Diferencias entre renting tradicional y renting flexible
El renting tradicional es el que consiste en un alquiler de uno o varios vehículos a largo plazo donde se puede disfrutar de un vehículo nuevo pagando una cuota mensual, por un plazo de tiempo y un kilometraje previamente establecido entre ambas partes en el contrato firmado.
Una de sus grandes ventajas es que en el pago mensual de la cuota se incluyen todos los servicios de mantenimiento, reparaciones, seguro, impuestos, sustitución de neumático, etc. Pero tiene el inconveniente que suele ser más estricto en cuestión al periodo de tiempo mínimo que se debe permanecer sin imposibilidad de rescisión de contrato bajo penalización económica.
Poder disponer de un vehículo con total flexibilidad y con gran parte de los servicios incluidos es una irresistible opción para muchos trabajadores por cuenta propia y para muchas pequeñas y medianas empresas. Te damos todos los detalles para que sepas de qué tipo de renting estamos hablando.
Lo mismo ocurre con el número de kilómetros recorridos al año, si se supera el límite pactado se deberá abonar una penalización. Por ello, pymes y autónomos no siempre terminan de ver con buenos ojos el renting tradicional.
> ¿Por qué es mejor el renting flexible para tu empresa?
Para mejorar las condiciones ofrecidas a los clientes con un perfil más profesional y que hacen del vehículo un instrumento de trabajo, surge el renting flexible con una flexibilidad muy a tener en cuenta.
La alternativa del renting flexible está más enfocada a aquellos clientes como pymes y autónomos que pueden verse obligados a hacer cambios en el contrato acorde a sus necesidades laborales. Por ejemplo, aumentar el kilometraje, rescindir antes de tiempo el contrato o incluso, cambiar de vehículo.
Beneficios del renting flexible para pymes
Te detallamos los puntos fuertes que tiene el renting flexible para que sea la mejor opción tanto para los autónomos como para las pymes:
- El periodo de contratación puede ir de 1 a 24 meses, tratándose de la modalidad ideal para aquellos que no estén interesados en un contrato a largo plazo.
- Ni el autónomo ni la pyme tienen que correr con las obligaciones derivadas de la propiedad del vehículo como ocurre con el renting clásico. De forma que todos los gastos derivados de su uso: mantenimiento, seguros, impuestos…correrían a cargo de la empresa de renting.
- Las cuotas de arrendamiento son 100% deducibles del IVA, IRPF o Impuesto sobre Sociedades, ya que fiscalmente son consideradas un gasto. En el caso de los turismos se debe usar únicamente para uso de la actividad profesional.
- Permite renovar y cambiar el vehículo cada periodo de tiempo.
- Los kilómetros recorridos pueden ser más flexibles sin temor a superarlos si se deja estipulado en el contrato para poder ajustar la tarifa adecuada.
> Diferencias entre renting y leasing
Como habrás leído, si eres pyme o autónomo hay un renting que mejor se ajusta a tu perfil. Estamos hablando del renting flexible que proporciona una mayor flexibilidad y posibilidades de personalización del contrato que se firme.
Entre las diferencias más notables que mejoran al renting tradicional están la posibilidad de poder excederse de los kilómetros sin penalización siempre y cuando se haya avisado en el contrato.
Además, tampoco hay que temer por largos periodos de tiempo, ya que el tiempo es menor y es el cliente el que puede decidirlo. Esta alternativa es mucho más ventajosa y permite tanto a pymes como autónomos una mayor tranquilidad para poder seguir con su actividad.
Si tienes cualquier duda, ponte en contacto con nosotros o elige el renting que se adapte a tus necesidades.
