14/02/2023

¿Cuándo te conviene comprar mediante un renting?

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¿Conoces las ventajas del renting? Este sistema te permite disfrutar de un coche mediante el pago de una cuota única de alquiler. Además de su disfrute, te garantiza servicios adicionales como su mantenimiento, la reclamación de multas y el seguro, entre otros.

En muchos casos, el renting es una buena alternativa. Pero no siempre. Si no tienes claro cuándo conviene el renting y cuándo no, te lo explicamos a continuación.

Cuando el renting es la mejor opción

Este tipo de contratos siempre se establecen por un plazo de tiempo determinado. Cuando expira, el usuario puede decidir renovar el contrato y seguir igual, comprar el coche o prescindir de él. Ahora bien, ¿realmente te conviene esta práctica? ¿Cómo te benefician las ventajas del renting?

El renting es tu opción

Si te encuentras en alguna de estas circunstancias, esta fórmula te puede ser muy válida:

  • No necesitas ser propietario de un automóvil. Valoras más ir cambiando cada cierto tiempo, y conducir siempre un vehículo actualizado.
  • Quieres evitar el desembolso de una inversión inicial. Sin embargo, no tienes problemas para pagar una cuota mensual moderada.
  • Valoras la tranquilidad de no tener que preocuparte por los gastos cotidianos de un automóvil.
  • Te complace poder establecer de antemano qué servicios y circunstancias corren de tu cuenta y cuáles no.
  • Eres autónomo o necesitas vehículos comerciales o profesionales para tu empresa. Las ventajas fiscales de esta fórmula te aportan jugosos beneficios económicos.
  • Te importa, sobre todo, contar con una solución de movilidad cómoda, fiable y barata. No eres un fanático de los coches, solo un usuario que los aprovecha para su satisfacción.
  • Tienes dudas sobre qué tipo de coche conviene comprar actualmente: motor de combustión, eléctrico, híbrido...

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El renting no es tu opción

Más allá de las ventajas del renting, no será una buena solución para ti si te encuentras en estas circunstancias:

  1. Necesitas sentirte propietario del vehículo que utilizas. Disfrutas presumiendo de él y te aporta seguridad ser su dueño.
  2. No te importa gestionar y asumir los costes derivados de su mantenimiento y uso.
  3. Quieres elegir tus proveedores en mecánica, revisiones y reparaciones.
  4. Eres fiel a un modelo determinado.
  5. No te gustan los cambios: prefieres la conformidad y te da seguridad que todo siga igual.
  6. Te cuesta negociar con bancos e instituciones financieras. No te sientes cómodo y te produce intranquilidad desenvolverte en esos trances.

Renting versus otras posibilidades

Visto lo visto, el renting puede ser una buena alternativa, pero cada caso es diferente. Hemos mencionado algunas ventajas evidentes de este sistema de uso. Por ejemplo, su fiscalidad especial para empresas y autónomos. Cuando necesitas una flota de empresa, no solo te permite evitar el desembolso a fondo perdido de unos pagos iniciales elevados. También te facilita establecer una cuota mensual única, por lo que el control económico es mayor. Por último, esos beneficios fiscales son muy provechosos siempre.

Queremos ayudarte a considerar con más criterio si te conviene o no apostar por un renting. Para ello, vamos a comparar las ventajas del renting con otras opciones.

Renting versus leasing

Algunas personas confunden estas opciones. Si bien es cierto que el renting puede terminar con una fórmula de leasing, son muy diferentes. La diferencia principal radica en el tipo de servicios que se incluyen en el contrato en uno y otro caso.

El renting, además del uso del vehículo, incluye servicios como las revisiones y las reparaciones, el seguro, la reclamación de multas, etcétera. Además, el conductor del vehículo no ostenta su propiedad, que siempre pertenece a la empresa financiera. Además, hay un plazo de tiempo y unos kilómetros al año definidos. Por último, el usuario no debe desembolsar ninguna cantidad a modo de entrada.

Sin embargo, el leasing es un sistema de alquiler también, pero contempla solo el uso del vehículo, no los servicios adicionales. El contrato de arrendamiento incluye la opción de compra posterior, aunque el renting plantea más alternativas. El contrato no se puede anular y tiene una duración mínima de dos años.

¿La principal diferencia? El leasing es más un sistema de financiación y, el renting, un alquiler todo en uno que resta preocupaciones. Con esto, la relación renting versus leasing queda perfectamente definida.

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Renting versus compra

¿Es mejor comprar directamente o utilizar un renting? Depende, una vez más, de cada caso. Cuando se hacen números al respecto, tomando en cuenta todos los costes derivados, el renting sale algo más barato para un periodo preestablecido. Sin embargo, pasados esos cuatro o seis años, por ejemplo, el usuario cuenta con un vehículo propio si lo ha comprado. Pero no es así con el renting. También es cierto que, conforme envejece el coche, mayores son los costes de mantenimiento y reparación. Por lo tanto, sentirte a gusto o no con este modelo es lo que debe llevarte a elegir esta opción. No exclusivamente el coste.

¿Ya tienes claras las ventajas del renting? Es un sistema asequible que aporta tranquilidad, servicios plenos y no obliga a pagar entrada. A cambio, renuncias a la propiedad del coche. Elige el renting que mejor se adapte a ti.