La compra de un coche suele ser el segundo gran desembolso que se hace después de la compra de una vivienda. Por eso, se debe intentar cuidar para que dure lo máximo posible en las mejores condiciones.
Siguiendo una serie de consejos sobre cómo mantener el coche como nuevo se puede lograr aumentar la vida útil de tu vehículo. Solo tendrás que prestar una mayor atención a los aspectos relacionados con la mecánica, al exterior y al interior del vehículo.
Te explicamos todos los detalles para que tu coche envejezca bien y se mantenga como el primer día que lo compraste.
Cuida la mecánica del coche
El motor del coche es el corazón y cuanto mejor esté, más saludable se encontrará. Debes mantener la mecánica de la forma más óptima posible.
Regularmente debes revisar los líquidos para cerciorarte que todo está correcto. Si no llevas un control adecuado de los niveles el problema puede agravarse y terminar acortando la vida del motor. Además, de los líquidos del motor debes también vigilar los del aceite y el refrigerante.
La batería también necesita que estés pendiente de su limpieza y oxidación. Si ves que el ácido del interior se ha salido o si algunos de los bornes está oxidado no quedará más remedio que cambiar la batería. Para evitar que esto ocurra se tendrá que limpiar la superficie de la batería para evitar su deterioro. La vida de la batería se puede alargar gracias a una serie de consejos muy sencillos:
- Desconectar la batería si el coche va a estar mucho tiempo parado.
- No encender elementos de gran consumo energético hasta que la temperatura del motor sea óptima.
- Repostar con combustible de calidad, ya que poseen aditivos y componentes especiales que protegen el motor.
Mención aparte también se merecen los neumáticos, que son la pieza clave para que el coche pueda rodar con normalidad. Cuidar de ellos debe ser una norma si quieres que tu coche se mantenga en las mejores condiciones y como el primer día. Para ello, deberás revisar la presión de cada uno de los neumáticos, además de vigilar la profundidad del dibujo. Hay que recordar que no se puede tener un dibujo menor a 1,6 milímetros.
Conducción suave
Para cuidar también la mecánica y fomentar la durabilidad del vehículo entra en juego la forma en la que se conduzca. Es aconsejable que la conducción sea de forma suave y relajada para que no afecte a los componentes mecánicos del automóvil. El embrague es quizás uno de los aspectos que más se deben cuidar.
Los cambios de marcha deben hacerse de forma suave y progresiva para no dar tirones o fricciones que puedan hacer sufrir al coche. El cambio de embrague es una de las averías más caras y que con un buen uso por parte del conductor se puede remediar.
Los frenos y la suspensión son otros de los componentes mecánicos que pueden contribuir a alargar la vida útil del vehículo si se usan de forma adecuada.
A la hora de efectuar la frenada conviene hacerlo de forma progresiva y evitando frenazos fuertes en el último momento, ya que los discos se desgastarán antes.
Cuando se circule por zonas con baches y badenes es mejor aminorar la marcha e ir a baja velocidad para así limitar el desplazamiento vertical del amortiguador y los muelles. Si vamos a una velocidad excesiva se puede llegar a dañar la suspensión.
También se debe tener en cuenta la dirección. Las maniobras no pueden hacerse de forma agresiva ni brusca. Asimismo, el volante no se debe girar con el motor parado porque puede causar daños en el sistema.
A la hora de hacer las maniobras de aparcamiento es importante que las ruedas y el volante queden totalmente rectos para que el circuito de líquido de dirección se conserve correctamente.
El exterior también es importante
La parte exterior del vehículo también debe cuidarse. Hay que evitar que el vehículo esté muy expuesto al frío o a un calor intenso. Los efectos atmosféricos pueden ser un factor que perjudique al coche. Si no se dispone de garaje es aconsejable taparlo con una funda o un plástico para que así, el sol, el frío o incluso la mala fe de alguien no pueda dañar la chapa.
Otro aspecto a tener en cuenta es la limpieza, si el coche se ve afectado por los excrementos de pájaros que no se deben obviar y deben ser limpiados cuanto antes. Estos restos orgánicos atacan a la pintura del coche y pueden incluso destruirla. La limpieza no es solo estética sino un acto de protección para mantener el coche en perfectas condiciones.
Buen mantenimiento
Prestar atención al interior del coche es también indispensable para mantener el coche como nuevo. La exposición al sol puede ser peligrosa a la par que dañina para las superficies interiores, las altas temperaturas pueden causar deformaciones o pérdida de consistencia. Es importante que te acostumbres a usar un parasol con el que se cubra el interior del coche si se va a poner al sol al vehículo durante largas horas.
La limpieza de la tapicería es un elemento esencial para así alargar la vida de los asientos, independientemente que sean de piel, cuero o tela. Cada uno se limpiará de una forma distinta pero es necesario que se haga con regularidad mediante el uso de una aspiradora.
Si eres fumador, siento decirte que fumar es algo que también afecta. El habitáculo del coche con el humo y los contenidos nocivos que se expulsan oscurecen las tapicerías, además se ensucian y desprenderse del olor también puede resultar un tanto difícil.
Si tienes en cuenta los anteriores tips sobre cómo mantener el coche como nuevo podrás asegurar que la vida útil de tu vehículo se ve alargada. Ya sabes que atender a todos los aspectos que rodean a la mecánica del coche como son el correcto mantenimiento de los niveles de líquido, el motor, la batería, los neumáticos, así como la correcta limpieza tanto del interior como del exterior o conducir de una forma relajada son factores positivos que pueden traducirse en una larga longevidad para tu coche.
